Un
batiburrillo es una mezcla de cosas inconexas. Un niño podía escribir un
mensaje a los Reyes Magos
Y, todavía no es muy ducho en eso
del uso de la sintaxis, podría fácilmente salirle eso: un batiburrillo-
Y eso se le permite a un niño.
Pero, a un profesional, aunque sea del “bestseller”, por lo menos
nosotros no lo perdonamos.
Claro, usted puede decir que el muy ilustre señor Dan Brown ha escrito
muchos libros, que se venden por millones y todo eso.
Pero si el resultado es como lo que hemos visto en la pantalla,
entonces…son batiburrillos.
Y la película, nada menos que del también famoso Ron Howard, para
nosotros es algo peor, porque gastarse nada menos que 75 milloncejos en este
asunto es como decir que todo un señor pastelero nos ofrece y por mucho dinero
un bizcocho muy hermoso, con aspecto más que apetitoso, pero que, cuando lo
partimos, comprobamos que, en su relleno, en lugar de harina y azúcar, lo que
ha puesto es tierra y yerba.
Claro, es con Tom Hanks, y Hanks es todo un gran favorito, y tal vez por
eso, a más de la fama de Brown, mucha gente a ver esta cosa. Pero, para
nosotros, desde la primera secuencia, nos pareció nos estaban dando gato por
liebre. Lo que hace Howard es, cada más menos 20 minutos, es tratar de dar al
espectador una especie de explicación de lo ha pasado durante ese lapso, con la
intención que no se pierda y pueda ir comprendiendo el conjunto.
Nosotros, después de un “maravilloso” recorrido por Italia, Estambul y
otros lugares exóticos, estábamos tan hartos que no esperamos el final.
Si usted es fanático de Dan Brown, vaya y gaste su dinero.
A lo mejor le gusta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario